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lunes, 22 de noviembre de 2010

Nirsell II

Aún no llegaba a creerselo, ¡era libre!; llevaba cuatro años esperando tal privilégio (si suprimimos la vez que vino su madre y le pagó la fianza, solo para terminar muerta a balazos).
- ¿Y ahora que? - Se dijo.
Lo primero era encontrar el establecimiento de su compañero. Se acercó a una mujer para preguntarle la calle, menos mal que seguía acordándose de donde era.
- Disculpa, - le dijo - sabe donde está la calle... -
- ¡aparta de mi camino, malnacido! -
- pero que... -
- ¡socorro, socorro!, dejame en paz si no quieres que te devuelva a la carcel -
- ¡cojones! - pensó - ¿como sabía eso? - al final decidió que lo mejor seria largarse.
- ¡Eso, vete!, puto asesino. Por culpa de esa carcel estas calles son cada vez más peligrosas. -
Caminó despacio hasta haberla perdido de vista; pero, para su desgracia, se percató de que los demás transeuntes seguían cada uno de sus movimientos con la mirada.
- Tranquilo, piensa, ¿que haría tu compañero en esta situación? -

- si,si,si,si, Nir, matalos, matalos a todos, todos, no dejes ni uno, si,si,si,si, sangre, ja,ja,ja -

- no, joder, ese compañero no - se dijo. Siguió pensando, sin dejar de caminar.

- Nir, tu tranquilo e ignoralos, son putos rastreros de las calles, no merece la pena romperse la cabeza por su culpa. Diríjete directamente a la calle, que está a las afueras, y si no da resultado, coge una motosierra y... -

- joder, que manía. Juré no matar nunca más, solo ansiaba venganza y ya la obtuve... Un momento... ¡Claro!, su apartamento está a las afueras de la ciudad -
Allí se dirigió, ignorando todas las miradas inquisitivas, y a la inquietante sombra que le perseguía desde hacía rato.
Siempre se había imaginado que sería una gran mansión o algo del estilo de un estafador, pero aquella casucha estaba que daba pena; por lo menos le serviría por unos cuantos meses.
- ¿se ha perdido? - un anciano se hacercó a él con cara de pocos amigos
- no... Esque yo... Estaba buscando el piso de un amigo mío pero... -
- ¡Anda!, Tu eres el que acaba de salir de la carcel; te he visto hace un momento en las noticias, ningún periodista quería acercarse a tí, ¿tan peligroso eres? -
- así que era por eso... - pensó
- seguro que conoces al "chulo" -
- pues sí, dijo que podía quedarme en su apartamento por un tiempo -
- a mí me da igual, mientras que él no vuelva - Nirsell no se esperó aquella contestación - soy coña, el casero, como te burles de mi nombre te quedas en la calle, ¡te enteras! -
- yo no he dicho nada -
- entonces vale - rebuscó en su bolsillo en busca del amasijo de llaves - es el tercero "c", toma la llave. Las normas son muy sencillas, el alquiler son 120 al mes, pero este mes no tienes porqué pagarme, teniendo en cuenta que acabas de salir de la carcel y eso. ¡Nada de prostitutas!, espero que sigas esta norma a rajatabla, en serio, odio a tu amigo -
- ya se nota -
- vale, si tienes algún problema estoy en el primero "A" -
- gracias -
- no es nada, se por lo que pasais. Cumples con la condena y te conviertes en mejor persona pero la gente no lo valora, te seguirá recriminando tus crímenes. Yo no lo creo así -
- ... -
- Bueno, tengo que irme; tendrás que subir por las escaleras, el ascensor está averiado y, como ves, por ahora no tenemos portal -
- ya,ya -
- pues eso, adios -
- adios. -

- Esto... Esto es una mierda -
Nada mas entrar en el piso se encontró con un millar de cajas bacías esparcidas por el rellano y apestosas bolsas de basura manchando las paredes.
- definitívamente, esto no era lo que yo tenia pensado para mi regreso pero... Habrá que apañarse, por lo menos no estoy tirado en un banco de algún parque en el que las palomas puedan usarme de cagadero -
"Casi, casi" dijo una voz en su interior, a la cual ignoraba y que no pronosticaba nada bueno.

Poco a poco fue apañando el piso, tirando hasta los muebles de su interior; pero se fue dando cuenta de que la gente le quería fuera de allí, cada vez que bajaba a tirar algo, venía alguien y le insultaba, incluso habian llegado a agredirle.
Aun así él seguia optimista ante el hecho de ser libre.
- Tendré que buscar un trabajo - pensó, mientras subía los últimos escalones para volver al piso - paso de toda esa gentuza, hice lo que debía y no me obligarán a cambiar de vida por esa puta -
"¿no?"
Al entrar en el rellano se dió cuenta de que aún quedaba mucho por hacer allí. Cogió unas cuantas bolsas más y bajó de nuevo las estrechas escaleras hasta el portal. Desde allí, se dispuso a cruzar la carretera para tirarlas al contenedor, cuando un coche de lujo le arroyó y se dió a la fuga.

No supo que pasó, había visto la cara del conductor pero ya no se acordaba, todo cuanto había acontecido desapareció de su memoria, excepto su odio que seguía alimentando al ser demoniaco que tenía en su interior. Cuando despertó y se vió envuelto en un millar de vendas sangrientas, en una incómoda cama de hospital, dejó el optimismo a un lado y ansió venganza. Una nueva venganza. Les haría pagar a todos, una vez más.


- Gracias, una vez más a Death Glam, por que me da la gana y a Aitor (Ragnarock es su programa, es brutal, no escuchareis nada igual, os lo aseguro), felicidades Dagka, por tu blog.

2 comentarios:

  1. XDDD y revisa lo de "lita de lectura" XDD sigue asi va?

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  2. lita, juaaaaaaajuajuajua juaaaaaaaaaaaaajajaja
    k fallo. menos mal k lo as dicho

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